Si has hecho un parón en tus entrenamientos para disfrutar de unos días de vacaciones, es probable que llegues con las pilas cargadas y mono por correr de nuevo. Ojo, dosificar mal esta energía al retomar los entrenamientos podría ir en tu contra.
Todo dependerá de cómo se haya tomado el parón veraniego cada uno y de si se ha dejado completamente de entrenar o se ha mantenido el ejercicio aunque haya sido de manera más libre. Esto condicionará más o menos la pérdida de forma que se haya sufrido pero es casi seguro que, en mayor o menor medida, forma se habrá perdido algo.
La situación que encontramos entonces es que uno llega con mucha energía y ganas de entrenar pero su forma física no será la misma que cuando paró de entrenar. Por esto es importante leer bien estos condicionantes y evitar caer en los siguientes errores a la hora de retomar los entrenamientos. Leer más