Quizá sientas que entrenar sin competiciones a la vista no te acaba de motivar. Puede ser que te cueste más comprometerte con tu entrenamiento y siempre encuentres buenas excusas. Poco a poco entrenas menos y con menos ganas. ¿Cómo podrías enfrentar esta situación de otra manera? ¿Sabes qué hace que te veas más desmotivado?
No es raro que no tener competiciones definidas como objetivo te haga coger con menos ganas tu entrenamiento. Seguramente el compromiso baje y te des más libertad para saltarte entrenos, recortarlos u olvidarte de sesiones más exigentes.
No te diremos que esto sea algo raro, es normal reaccionar así.
Es por esto que también siempre hablamos de que un objetivo es importante para la motivación. Cuando uno define un objetivo alcanzable, que ve que podría realizar aunque no sin esfuerzo, automáticamente se dispara la motivación. Entras en situación de estar dispuesto a enfrentar obstáculos y hacer sacrificios que en otras circunstancias podrían parecerte impensables. Leer más